Terapia Ocupacional
El objetivo de la terapia ocupacional es valorar la capacidad de la persona para realizar sus actividades cotidianas. También participar en su entorno y diferentes contextos, contribuyendo a su recuperación y/o facilitando la adaptación a su situación y así como aumentar su grado de autonomía y mejorar su calidad de vida.
Psicomotricidad
Todo el conocimiento y el aprendizaje, parte de la propia acción del niño sobre el medio, los demás, y las experiencias que recibe no son áreas estrictas que se puedan parcelar, sino manifestaciones diferentes aunque interdependientes de un ser único: EL NIÑO.
Es una técnica que pretende favorecer el dominio del movimiento corporal, ese desarrollo motor y la relación con el medio o las personas y la comunicación. Está basada en el desarrollo integral de la persona mediante el uso del movimiento, su desarrollo socio-afectivo y cognitivo.
Podemos hacer uso de la psicomotricidad de diferentes maneras y tanto de forma individual como grupal.
A nivel educativo, dirigido al niño sano, para estimular el desarrollo global mediante el juego y la actividad motriz.
O a nivel re-educativo, con el objetivo de fomentar el desarrollo de niños/as con trastornos o retrasos en el desarrollo haciendo que se produzca un avance lo más homogéneo posible dentro de sus capacidades.
Grupos de Psicomotricidad, habilidades sociales y juego
La ocupación más importante en la infancia es el juego, es por esto que hacemos uso de esta herramienta para trabajar aspectos que interfieren en su desarrollo, su desarrollo madurativo, etc.
Los niños al tiempo que se divierten mediante el juego, también desarrollan y perfeccionan sus habilidades motrices, se potencian las habilidades sociales, empatía, comunicación y se fomenta la creatividad.
Integración sensorial
La integración sensorial es la capacidad del Sistema Nervioso Central para organizar e interpretar las informaciones captadas por los diversos sistemas sensoriales (visual, auditivo, gustativo, olfativo, táctil, propioceptivo y vestibular) y poder responder así de forma adecuada al ambiente que nos rodea.
Pero puede ser que haya un mal funcionamiento de la organización de la información dentro del S.N.C., el cual no consigue organizar los impulsos sensoriales para poder darle al individuo una información adecuada y precisa sobre él mismo y su ambiente.
Esta disfunción suele reflejarse en el comportamiento y en la coordinación motora.
Es lo que se conoce como Disfunción de Integración Sensorial (DIS) o Desorden en el Procesamiento Sensorial (DPS).
Puede cursar de forma aislada o como parte de otros: Trastorno del espectro autista, trastorno por déficit de atención e hiperactividad, trastorno de coordinación motora del desarrollo, trastornos de ansiedad en la niñez…
La terapia de integración sensorial es realizada por el Terapeuta ocupacional, a través del juego, ocupación principal en la infancia y parte de la motivación interna del niño.
Se pueden manifestar de la siguiente forma:
- Niños con alta distractibilidad, respuestas exageradas ante el contacto físico. Desagrado ante ciertas texturas. Miedo exagerado ante movimientos básicos o a los juegos del parque o sonidos fuertes.
- Pequeños que buscan estímulos de forma exagerada y continuada. Por ejemplo, chocar contra los objetos, buscar el contacto con los demás constantemente o con brusquedad.
- Los niños que buscan el movimiento continuamente o por el contrario le disgusta moverse y se cansa fácilmente.
- O aquellos que tienen poco equilibrio, patosos, des coordinados, tienen muy poca precisión motriz, tiene dificultades para aprender nuevas tareas motrices y el manejo de objetos (pinturas, lápiz, cubiertos, pelotas…).
Casos típicos son texturas que le molestan, ruidos inesperados que le pueden irritar, comida de muy pocos alimentos o por ejemplo correr, o gritar en un centro comercial… esto viene derivado de:
- La sensibilidad al ruido, es decir, el procesamiento sensorial de los ruidos donde los pequeños pueden ser muy sensibles al ruido en
su entorno. - La sensibilidad táctil. Que indica que el pequeño puede tener mucha o muy poca sensibilidad al tacto. Esto le va a provocar que desde comer comidas con texturas distintas hasta bañarse sea todo un reto.
- La sensibilidad al gusto. siendo sensibles a los sabores y los olores, especias, determinadas comidas o una pasta dentífrica.
- La sensibilidad visual. Donde la intensidad de las luces, la radiante luz natural o a veces lo contrario, o el desorden visual, es un determinante indicador de procesamiento sensorial.
Hablamos de Integración sensorial cuando tratamos de regular las sensaciones que llegan a nuestro sistema nervioso y fomentar una respuesta normalizada a esa sensación, tratamos de proporcionarle y organizar estímulos que den lugar a que él pueda organizar sus comportamientos y generar aprendizajes. Si tienes cualquier duda nuestro equipo de integración sensorial boadilla del monte estará encantado de concerte y ayudaros.
Por otro lado, la estimulación multisensorial, agrupa el sistema de estímulos que proporcionaremos a las pequeños con necesidades especiales o de apoyo generalizado, de forma que consigamos activar y actuar sobre las áreas cerebrales que no están despiertas a través de estimulos visuales, auditivos u olfativos a los que por sus necesidades no tendrían acceso.
¿Te ayudamos?
En anda CONMiGO nos caracterizamos por ser EXPERTOS en ATENCIÓN TEMPRANA Y RETRASO MADURATIVO. Nuestros terapeutas son grandes profesionales, especializados, que utilizan el juego como vía de aprendizaje.