En el post anterior os hablamos de los beneficios de los masajes para bebes, hoy queremos daros estos consejos para su realización.

Es muy importante la preparación del dónde vamos a darle un masaje a tu bebé, ya que todo lo que os rodea os ayudará a conectaros mejor durante el masaje.

Para ello, podemos utilizar algunos productos y lugares para el cuidado del bebé, como por ejemplo:

Ambiente tranquilo y cálido

Encuentra un lugar seguro y cómodo donde poder hacer el masaje. Asegúrate de colocar al bebé de forma que te vea bien la cara.

Que no haya corrientes frías de aire, para que el bebé se sienta cómodo y seguro estando desnudo. Lo ideal es que la temperatura sea elevada, aproximadamente 24 grados. Para conseguir la temperatura perfecta, te puedes ayudar de un termómetro que además de decirte la temperatura, también te pueda indicar la humedad de la habitación.

No olvides cubrir las partes del cuerpo del bebé que no estés masajeando, para evitar que se enfríe el pequeño se enfrié y pierda la temperatura adecuada que hemos conseguido para la realización del masaje.

Luz tenue y delicada

La luz de la habitación no tiene que ser demasiado fuerte, ya que lo que se busca es la relajación y conexión con nuestro bebé. Es preferible que la luz no le enfoque directamente.

Te recomendamos apagar la luz principal del lugar en el cual se va a realizar el masaje, y utilizar una luz auxiliar que ilumine la habitación suavemente creando un ambiente seguro para tu bebé.

Aceites relajantes

Para dar el masaje a tu bebé te puedes ayudar y utilizar de aceites corporales delicados, especiales para niños, que no vayan a causar ninguna reacción alérgica a tu bebé. Preferentemente orgánico y sin perfume, sobre todo los primeros meses de vida, de manera que puedas establecer un vínculo afectivo a través del olfato.

Estar tranquilo

Antes de comenzar, tómate tú tiempo para relajarte, respira hondo un par de veces. Así tu bebé, podrá relajarse también contigo.

Cuando vayas a dar el masaje a tu bebé, tienes que estar tranquilo y relajado, ya que vas a originar un momento de complicidad con tu bebé. Debes acordarte también de lavarte bien las manos, y quitarte cualquier anillo o pulsera, para que el contacto con tu bebé no tenga obstáculos y estos no le puedan hacer ningún daño.

¿Cuál es el mejor momento de día para masajear a tu bebé?

Para realizar un masaje a tu bebé, no tiene que estar demasiado activo ni cansado o a punto de dormirse, ya que, probablemente, el pequeño pueda rechazar el masaje.

No está estipulado que haya un momento concreto para darle masajes a nuestros bebés. Los masajes se pueden hacer en muchos momentos del día, aunque es recomendable evitarlos después de las comidas.

También debemos tener en cuenta que tu bebé se encuentre en un momento óptimo para ello. Una buena oportunidad para estos masajes sería, por ejemplo, después de bañar a tu bebé, ya que después del baño, el bebé se encontrará relajado, limpio y receptivo ante los estímulos.